Por: Ainoa Martin Salaet
La tecnología ha llegado a nuestro mundo para quedarse y es innegable que ha causado un cambio en la forma de hacer muchas cosas, donde, por supuesto, la literatura está incluida. La evolución tecnológica ha transformado la forma en que se escriben, publican, distribuyen y consumen los libros, dando lugar a un cambio constante del mundo literario.
Uno de los cambios más significativos se muestra en la manera de consumir la literatura. De la mano de la digitalización han llegado los libros electrónicos, plataformas de lectura en línea y bibliotecas digitales, ampliando enormemente la disponibilidad de obras literarias. Antes de la era digital, leer era una actividad solitaria, la cual involucraba a la persona y un libro físico. Actualmente, el hábito de la lectura se ha visto modificado en el aspecto que, ahora, gracias a los e-books se pueden llevar encima una gran cantidad de libros, teniendo acceso directo a ellos y facilitando la lectura en cualquier momento y lugar. Una alternativa de consumo son los audiolibros, los cuales permiten al lector realizar otras actividades a la par que escuchan las obras, haciendo que este pueda disfrutar de una versión del libro diferente a lo que se está acostumbrado. Otro aspecto del consumo de la literatura que ha hecho que esta se viva en comunidad son los sitios web y las aplicaciones que permiten a los lectores compartir los libros que leen y comentarlos junto con otros usuarios.
La tecnología ha abierto nuevas posibilidades para la experimentación literaria, donde los escritores están explorando nuevos formatos y medios para contar historias. La narrativa transmedia permite dar un enfoque en el que el relato se desarrolle a través de
múltiples medios y plataformas, como pueden ser libros, películas, videojuegos, sitios web y redes sociales, permitiendo a los autores expandir y enriquecer el mundo de una historia, involucrando así también a los espectadores en diferentes niveles y proporcionando una experiencia narrativa más inmersiva y participativa. Por otro lado, también están los libros interactivos, a través de los cuales a los lectores se les permite participar activamente en el relato, ya sea tomando decisiones que afectan el curso de la trama o interactuando con elementos multimedia que se encuentran en el texto. Además, la realidad virtual y la realidad aumentada están cambiando la forma en que leemos, ofreciendo experiencias más envolventes. Con la realidad virtual, los lectores pueden
sumergirse por completo en un entorno virtual y explorar mundos literarios de manera interactiva. La realidad aumentada, por otra parte, superpone elementos digitales en el mundo real, permitiendo a los lectores ver personajes y escenas de una historia
integrados en su entorno físico.
La expansión de la tecnología también ha transformado profundamente la forma en que los autores y los lectores interactúan en el mundo de la literatura. Antes, la interacción entre escritores y lectores se basaba en métodos más tradicionales como el correo postal,
los eventos físicos y los medios de comunicación convencionales. Ahora, gracias a la llegada de redes sociales y plataformas como Instagram, TikTok y Goodreads, los autores pueden conectarse directamente con sus lectores, generando una sensación de
comunidad. Además, los blogs y los sitios web brindan a los escritores un espacio para compartir contenido adicional y profundizar la relación con su audiencia. Los eventos literarios –como pueden ser charlas en línea, lanzamientos de libros y clubes de lectura virtuales– y los foros en línea proporcionan oportunidades para que autores y lectores se conecten alrededor del mundo sin necesidad de desplazarse y generar un vínculo más cercano entre ambas partes.
El impacto de la tecnología en la literatura es un fenómeno fascinante y en constante evolución que ha transformado profundamente la forma en que se escriben, publican, distribuyen y consumen los libros, abriendo un mundo de oportunidades para la innovación y la creatividad, e invitando a explorar nuevas formas de contar historias que nos hagan soñar.
